El viernes es el día de la torta. ¡Y esta tarta, también hecha un viernes, terminó viniendo con nosotros de vacaciones! Tengo la costumbre de preparar varias cosas para llevar, porque después me facilita el día a día y gestionar mis vacaciones en casa. La tarta de yogur es sencilla, super fácil de hacer, a todo el mundo le gusta, y como no hay cremas ni coberturas. Además de viajar bien, también puedes llevarte un poquito a la playa para un bocadillo más dulce, también puede ser una tarta ideal para hacer durante las vacaciones, porque no hace falta báscula. Como usé yogur natural, terminé condimentando mi pastel con solo un poco de ralladura de limón. Pero pueden utilizar cualquier sabor de yogur, o incluso natural, sabor con naranja, limón, canela …
Ingredientes:
4 huevos
125 ml de yogur natural (1 taza)
3 veces la medida de una taza de harina sin levadura
1x taza de aceite vegetal
2x la medida de la taza de azúcar
ralladura de 1 cáscara de limón
1 cucharada de postre de levadura en polvo
Preparación:
Pon todos los ingredientes en un bol y bate con un palito de alambre o cuchara de madera hasta obtener una mezcla homogénea.
Verter la mezcla en un molde con un agujero previamente engrasado y espolvoreado y colocar en el horno previamente calentado a 180ºC durante unos 40 minutos o hasta que el bizcocho esté cocido.
Retirar del horno, dejar enfriar un poco y desmoldar, dejando que el bizcocho se enfríe por completo sobre una rejilla.
¡Buen provecho!