De las recetas de verano más sencillas y frescas. Una variación de la tradicional ensalada de cereales y bacalao, esta vez con tomates de verano dulces y maduros.
Una receta que se puede hacer con anticipación y que está lista para servir, ideal para picnics, como entrada a un almuerzo con amigos o un almuerzo con almuerzo y almuerzo, ¡este clásico que llegó para quedarse en nuestras vidas!
¡Espero que lo disfruten!
Ingredientes para 4 personas:
500g de garbanzos cocidos y escurridos
450g de bacalao descongelado y descongelado
1 cebolla grande
2 dientes de ajo
4 tomates cortados en cubitos
1 hoja de laurel
sal y pimienta
perejil picado
aceite de oliva
vinagre también
Preparación:
Cortar la cebolla en medias lunas y picar los dientes de ajo. Llévalos a dorar en una sartén con un poco de aceite junto con la hoja de laurel y en cuanto empiece a dorarse añadir el bacalao, descongelado, bien escurrido. Envuelve bien la cebolla y déjala cocer hasta que esté cocida, sazonando con un poco de pimiento.
Mientras tanto, escurre bien los garbanzos cocidos y colócalos en una fuente. Cortar los tomates en cubos y añadirlos al grano. En cuanto el bacalao esté cocido, envolver también con el grano y el bacalao.
Para sazonar, mezcle aproximadamente 3 cucharadas de aceite con 1 cucharada de vinagre y mezcle bien. Espolvorea con perejil picado.
Servir.
¡Buen provecho!