Cuando organizo fiestas de cumpleaños en casa, no hay vuelta atrás. Siempre somos muchos que la familia es grande. Y porque también me aseguro de invitar a nuestros amigos que son de la familia. Por supuesto, se necesita algo de trabajo para recibir a tanta gente en casa, pero es solo dos o tres veces al año, y de verdad insisto.
Nunca sabemos el mañana. Y creo que por eso debemos aprovechar todas las oportunidades que nos brinda la vida para unir a las personas que nos gustan y celebrar, vivir, disfrutar, convivir. Porque mañana puede ser todo diferente …
Por supuesto, recibir a mucha gente siempre tiene la pregunta de qué cocinar. Y lo que puede hacer que le guste a todo el mundo, sea rápido y sencillo.
Y fue con esta idea que surgieron estos caracoles frondosos. Tan o más simple de hacer como rollos de salchicha. Y los he preparado en varias versiones, desde salmón ahumado hasta jamón y mostaza. Esta vez chorizo y queso y un toque de orégano y conocieron la pizza.
Ingredientes para unos 50 caracoles:
2 paquetes de hojaldre refrigerado listos para usar
200g de queso mozarella rallado
200g de chorizo
orégano seco
Preparación:
Estirar el hojaldre dejándolo estirado. Colocar las rodajas de chorizo encima de cada masa (unos 100g en cada masa) y el queso rallado encima del chorizo (100g en cada masa también).
A continuación, enrolle cada una de las masas como si fuera un pastel, córtelas en rodajas de 0,5 cm de grosor y colóquelas después en un bol forrado con papel vegetal.
Espolvorear con orégano seco y hornear en horno precalentado a 200ºC durante unos 20 minutos o hasta que la masa esté bien inflada.
Retirar del horno y dejar enfriar un poco. Puedes hacer los pasteles de víspera y guardarlos después de que estén fríos en una caja hermética hasta el momento de servirlos.
¡Buen provecho!